“Llegará un momento en que los médicos y psicólogos no describirán una condición de enfermedad como lo hacen hoy, sino que se hablará de ella en términos musicales, como se  hablaría de un piano desafinado” – Rudolf Steiner

¿Qué es una terapia de sonido y en qué consiste? ¿Qué beneficios podemos obtener al asistir a una sesión?

Las terapias de sonido individuales son tratamientos poco conocidos para el público en general. Por otro lado las sesiones grupales de sonido sanador o baños de sonido se popularizaron en los últimos años, principalmente en los entornos del yoga y las terapias holísticas. Debido al interés en estas experiencias surgió el siguiente pensamiento: “si siento tanto bienestar en una sesión grupal, cuánto más podría sentir en una sesión exclusiva y personalizada para mí”.

 

Como músico y terapeuta de sonido he visto en muchas ocasiones que tras finalizar una sesión grupal algunas personas comentan haberse relajado tan profundamente que su cuerpo se liberó de muchas de las tensiones que acumulaba. Aseguran que es similar, y en ocasiones superior, a un masaje físico. Curiosamente en ningún momento estoy en contacto con sus cuerpos, pero la vibración produce este efecto tan asombroso.

 

En lo que respecta a las sesiones de terapia individuales, uno de los fundamentos en los que se basan es el llamado principio de resonancia. Si tenemos dos gongs afinados en la misma nota, al tocar uno, el otro comienza a vibrar por simpatía. Este mismo principio es aplicable al ser humano. Dependiendo de las frecuencias y ritmos que emplee, puedo influir sobre el cuerpo energético y físico, bien sea de forma armónica o disarmónica. Nuestras emociones, pensamientos e incluso todo nuestro cuerpo vibra con la energía del sonido.

 

En la antigüedad las tradiciones yóguicas y chamánicas descubrieron que los centros energéticos o chakras eran sensibles a la música y a las frecuencias. Al aplicar ciertos ritmos y vibraciones, a través de la voz u otros instrumentos ancestrales como la flauta o la percusión, constataron que era posible mejorar el estado de salud y elevar la conciencia hacia estados de mayor conexión con el ser y la naturaleza.

 

“Llegará un momento en que los médicos y psicólogos no describirán una condición de enfermedad como lo hacen hoy, sino que se hablará de ella en términos musicales, como se hablaría de un piano desafinado”.
– Rudolf Steiner

 

Una buena terapia de sonido requiere de una serie de características básicas como son:
– Un lugar con un ambiente tranquilo y espacio diáfano.
– Instrumentos, de alta calidad y gran resonancia armónica.
– La actitud del facilitador, su sensibilidad, destreza y conocimientos.

En Augusta Eco Wellness Resort realizamos las terapias de sonido sobre una camilla monocordio, la cual consiste en una camilla de madera hueca a modo de caja de resonancia y que en la parte inferior se compone de cuerdas, todas afinadas en la misma nota. De este modo, al hacerlas sonar, producen una vibración en toda la camilla con un sonido envolvente y una gran variedad de armónicos. La vibración viaja a través del cuerpo  óseo produciendo una profunda relajación interna.

 

Además empleamos los gongs, cuencos tibetanos e instrumentos de cristal de cuarzo como los cuencos alquímicos, diapasones, copas, merkaba y arpa de cristal. Otro elemento esencial es la voz, la cual usamos a modo de afinador interno para iniciar la sesión en un estado relajado y meditativo.

 

Una cuestión a tener en cuenta es que los instrumentos siempre sean de una gran calidad de armónicos. Actualmente hay múltiples estudios en donde se reconoce el gran poder curativo de los armónicos. Estos van desde la ayuda en la recuperación de lesiones a la mejora en procesos cognitivos y neuronales. Un armónico es una frecuencia que emerge de una nota fundamental, siendo siempre más agudo que está y en base a una proporción matemática natural. Todos los sonidos naturales, como el río, o el canto de los pájaros, son ricos en armónicos. La música electrónica, en cambio, es más pobre en armónicos y estos al ser generados artificialmente no tienen la misma capacidad sanadora.

¿Qué duración tienen las terapias de sonido?

En lo respecto al tiempo de una sesión individual, para que produzca un resultado profundo es recomendable que al menos tenga una duración de sesenta minutos.

Personalmente me gusta iniciarlas con unos ejercicios vocales que combinan la respiración y la meditación, finalizando con una integración de la experiencia. Así las sesiones pueden alargarse hasta la hora y media en algunas ocasiones.

¿A quiénes van dirigidas las terapias de sonido y qué beneficios podemos obtener?

Estas sesiones están dirigidas a todas las personas que tengan interés en explorar y vivenciar los beneficios del sonido sanador así como generar un reequilibrio o armonía en su cuerpo físico y energético. Están especialmente indicadas para las personas que estén pasando por una época de estrés, tengan insomnio o una sensación de cansancio constante. También para quienes necesitan inspiración y mayor claridad en sus vidas así  como para pasar sencillamente unos momentos en total calma y armonía, dejando ir todo aquello que nos obstaculiza en la vida.

Como la vibración y los sonidos no inciden de forma agresiva sobre el cuerpo este tratamiento está indicado para la mayoría de las personas.

 

En definitiva, el universo sonoro tiene infinitas posibilidades que aún estamos en camino de descubrir. El conocimiento de las tradiciones antiguas nos brinda una gran sabiduría. Ahora está en nuestras manos seguir explorando para que estas terapias sean de gran ayuda en el restablecimiento de la salud integral del ser humano.

Adrián Barreiro
Terapéuta de Sonido
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