Desde los albores de la humanidad los seres humanos han utilizado el lenguaje para comunicarse y expresar sus pensamientos y sentimientos. A su vez, otra forma de expresión emergió en la conciencia humana. Un lenguaje para comunicarse con las energías más elevadas. Un lenguaje denominado sagrado pues al emplearlo del modo adecuado nos da la posibilidad de conectar con cualidades y aspectos profundos del Ser. Este lenguaje es el sánscrito y de él provienen los mantras.
La palabra sánscrita mantra literalmente se traduce como “herramienta o instrumento de la mente”. En otras tradiciones como la budista se traduce también como “aquello que protege la mente”.
En los Vedas (textos sagrados de la India) encontramos a los Rishis, estos sabios o sabias videntes descubrieron ciertas frecuencias que se manifiestan en estados profundos de meditación. Esas vibraciones las sintetizaron en lo que conocemos como mantras y las transmitieron de forma oral y escrita. Los mantras son realmente un tesoro que aún contienen su energía original.
Para dar una definición de mantra más amplia comparto las palabras del gran yogui Swami Vishnu Devananda:
Un mantra es una energía mística dentro de una estructura de sonido. Todo mantra encierra en sus vibraciones un determinado poder. Por medio de la concentración y repetición se libera su energía y esta toma forma. Así como la gravedad fue descubierta por Newton, los mantras fueron revelados a los antiguos maestros, codificados en las escrituras y transmitidos de maestro a discípulo.
De entre las vibraciones universales, la más conocida quizá sea el “OM”. Es llamado “Pranava Mantra” (mantra primigenio). Se lo denomina de este modo al ser considerado el primer sonido en la creación. En los Vedas (escrituras sagradas de la India) leemos “Nada Brahma”. Es decir que “Nada”, que se traduce como sonido, es “Brahma”, que se traduce como la Totalidad o lo Absoluto. En resumen: El Todo Es Sonido.
Los mantras de una sola sílaba, como es el “OM”, se combinan con otras para generar mantras más complejos. Por ejemplo, en la tradición tibetana en el mantra “OM AH HUNG” cada una de las sílabas tiene un significado y unidas cumplen una función fruto de la sinergia. En este caso una traducción resumida de su significado simbólico es que este mantra representa la purificación y armonización del cuerpo (Om) palabra (Ah) y la mente (Hung). Es importante señalar que un mantra es mucho más que su significado simbólico ya que la energía que evoca trasciende el pensamiento conceptual. Es más una experiencia que una teoría.
De entre los mantras también se distinguen diferentes categorías en función de su uso y significado. Hay mantras que se dirigen a la salud física, en cambio hay otros que ponen el foco en el despertar espiritual. También hay los llamados “nirguna” (sin forma), que aluden a una visión más abstracta de la consciencia universal. Por otro lado están los “saguna” (con forma), que aluden a una deidad o dios/a específica y con la cual mantenemos una relación personal a través de sus enseñanzas y características. Además de este tipo de mantras también los hay para equilibrar las energías de los astros, para iniciar una meditación o recibir una enseñanza, para bendecir los alimentos, y otros muchos más.
Los mantras implican resultados muy diversos pero en general todos conllevan un estado interior de armonía, paz, dicha, salud, bienestar, compasión, elevación y sabiduría.
– Para empezar a recitar mantras basta con disponer de un lugar tranquilo, sentarnos con la espalda erguida en una silla o en suelo sobre un cojín.
– A continuación inhalar por la nariz profundamente y exhalar con un largo y profundo “Oooommmm…”.
– Puedes dedicar 5 o 10 minutos a esta práctica.
– Es importante que el sonido sea suave y que no fuerces la voz. No por más intensidad se obtienen mejores resultados, la calidad es lo importante. Hazlo por lo tanto con atención en el aquí y el ahora, dejando a un lado los pensamientos acerca del pasado o el futuro.
– Eventualmente puedes dejar unos segundos de silencio tras el “OM”, así podrás adentrarte en un estado meditativo de mayor profundidad.
Con un poco de práctica y paciencia verás el cambio que se produce en tu interior, ¡es asombroso!
En próximas publicaciones compartiremos más información en detalle sobre diferentes estilos de mantras y sus usos.
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